martes, 18 de agosto de 2015

Izquierda Unida lamenta que las doce CCAA opuestas a la LOMCE hayan sido incapaces de presionar para conseguir llevar a cabo la demanda de la comunidad educativa de paralizar su aplicación.

 17 de agosto de 2015

Además se mantiene la única reválida prevista para el curso que comienza en quince días, la de 6º de primaria. Es decir, todo sigue igual.

lomcenoEs lamentable que también con las reválidas de secundaria de 2º y 4º sólo se haya conseguido que se aplace la aprobación del decreto que las regula, y no se hayan suspendido. Máxime cuando en este curso 2015-2016 la LOMCE sólo entra en 1º y 3º. Por lo que toda la oposición que anunciaron 12 de las 17 Comunidades Autónomas a la LOMCE parece que han sido fuegos de artificio que no han servido para nada. O quizá para demostrar lo que Lampedusa explicaba en el Gatopardo: dar una imagen de cambio aparente, para que la base, el núcleo del sistema, permanezca incólume e inalterado.

La total falta de apoyo cosechada en el ámbito parlamentario cuando se aprobó esta contrarreforma educativa de Wert y el amplio rechazo mostrado por todos los sectores de la comunidad educativa, muestra a las claras la necesidad y actual urgencia de no sólo implementar medidas "paliativas", sino de escuchar a la comunidad educativa y a la sociedad en general, relegando el empeño del partido –por ahora en el gobierno- de poner en marcha una ley que nació muerta, y que provocará aún más caos al inicio del nuevo curso en colegios e institutos, con el consiguiente perjuicio para padres y madres, profesorado y alumnado como denuncia la Confederación de Estatal de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA).

No se trataba sólo de que se acordara la dotación de los más de 30.000 profesionales de la enseñanza recortados y que ha supuesto un desmantelamiento de la educación pública, o la inmediata retirada de las reválidas y la recuperación del sentido formativo de la evaluación, o el incremento de la inversión educativa y becas a la media europea o el desarrollo de programas de atención a la diversidad. Se trataba de que en la Conferencia Sectorial se acordara paralizar definitivamente la aplicación de esta contrarreforma educativa que atenta contra el derecho universal a la educación en condiciones de igualdad, y que busca seleccionar futuras élites dirigentes segregando y excluyendo a quienes más apoyo necesitan.

Por lo que nos centraremos en seguir progresando en el amplio debate que se está realizando ya con toda la comunidad educativa, los movimientos sociales, los sindicatos, especialistas en educación, partidos políticos y mareas verdes, en la construcción colectiva de una alternativa compartida de modelo educativo a través del ‘Documento de bases para una nueva Ley de Educación, Acuerdo social y político educativo’ para dar, por fin, estabilidad al sistema educativo español.